Hay juegos que solo tienen un final posible. Un thriller oscuro e inteligente. Todo comenzó el día delterrible accidente , durante la feria, cuando Eddie, de doce años, conoció alHombre de Tiza . Fue el Hombre de Tiza quien le dio la idea de los dibujos, una manera deintercambiar mensajes secretos entre su grupo de amigos. Fue divertido hasta que los dibujos los condujeron alcuerpo sin vida de una niña . Sucedió hace treinta años y Ed creía que todo había quedado olvidado. Sin embargo, un día recibeuna carta que contiene solo dos cosas: una tiza y el dibujo de un muñeco. La historia se repite y Ed se da cuenta de que el juego, en realidad, nunca terminó... Todos tenemos secretos. Todos somos culpables de algo. Y los niños no son siempre tan inocentes como parecen.