Heredamos la capacidad de temer. No obstante, son nuestras experiencias de vida las que determinan a qué aprendemos a tener miedo y en qué grado. En esta obra, el autor nos ofrece una visión del miedo contraria a la opinión generalizada de que se trata de una emoción detestable. Con base en estudios científicos, y en el análisis psicológico de personas que logran superar sus miedos, podemos concluir que el miedo nos juega a favor (incluso en situaciones devastadoras) siempre y cuando entendamos cómo opera. Usted encontrará aquí ejemplos concretos y sugerencias para retar sus miedos en diferentes ámbitos de la vida (deporte, relaciones de pareja, trabajo, escuela, etc.). "No estamos obligados a ser víctimas pasivas de nuestros miedos, somos seres inteligentes que sabemos sacar provecho de nuestra sensibilidad al peligro. En nuestro caso, esa sensibilidad al peligro se puede encauzar para desarrollar nuevas habilidades de adaptación a nuestro entorno (retar al miedo), y así mejorar tanto nuestra eficiencia como nuestro autoconocimiento."